La emoción de ver que estaban incluidos Rudy y Marc entre los elegidos para el All Star Rookie Challenge no me dejó ver algo tan extraño. Es como cuando se suele decir que los árboles no te dejan ver el bosque... La evidencia es que Kevin Love no está dentro del equipo de los novatos, para sorpresa de muchos, él incluido.
Sus datos están ahí. El novato que mejor valoración por minuto jugado tiene de todos, el sexto en valoración (con muchos menos minutos que los 3 primeros) y el mejor reboteador. A esto que confecciono una teoría para argumentar esta circunstancia:
Love ha jugado bien, pero casi siempre saliendo desde el banquillo, en un equipo condenado al ostracismo y con poca publicidad en el mercado NBA.
Además, su máxima anotación "sólo" es de 20 puntos, y todos sabemos que es muy llamativo en EEUU maquillar el boxscore con una anotación espectacular para mejorar tu caché. Injusto pero es así.
La hornada de jugadores exteriores este año es jugosa (Mayo, Rose, Rudy, Westbrook,...) por lo que había poco hueco para interiores.
Brook Lopez y Marc Gasol son dignos participantes del partido de novatos, pero ¿y Oden? ¿no está defraudando? Pues para ellos parece que no, porque lo premian con esa participación por delante de Love. Me pregunto si no habrá un cierto sobreproteccionismo sobre el niño bonito de los Blazers para que no se convierta en un chasco tipo Bowie...
Cada vez comprendo menos a estos americanos, que teniendo a una futura estrella blanca perfil YMCA en su repertorio, pasan olímpicamente de él. Obviamente, no abogo por una discriminación positiva por causas raciales, pero hay que llamar a las cosas por su nombre, y el hecho de que Love no esté en el Rookie Challenge me parece totalmente injusto. Y eso que soy de los Kings...
A esta hora de la noche deben ser cuatro gatos los que no sepan que Rudy Fernández y Marc Gasol van a participar en el partido del All Star de Rookies frente a Sophomores. El resto de los quintetos lo podéis leer en la propia página de NBA.com.
Este artículo no era para eso, sino más bien para felicitar a ambos por ese logro, desearles la mejor de las actuaciones e instarles para el año que viene de nuevo a ese acontecimiento. Enhorabuena a ambos.
Además, mañana publicarán también si Pau accede al All Star de los mayores como miembro de los suplente del Oeste. Suerte también al gurú de los nuestros.
Curiosa la temporada de Shawn Marion en los Heat. A pesar de ser un jugador de valía contrastada, forjada sobre todo en su etapa de los Suns de Mike D'Antoni, en Miami no paran de buscarle novias. Que sí, que llegó a Miami para que éstos se pudieran quitar el lastre del contrato de Shaquille, que el estilo de juego sin un base asistenciador (si se me permite la expresión) no le beneficia, que para esa labor ya draftearon a Michael Beasley, todo lo que queráis. Pero la pregunta es, ¿por qué tanta obsesión en traspasarle cuando puede contribuir?
La lista de futuros destinos no es corta. Suenan Sacramento y Toronto ahora mismo, pero hace relativamente poco tiempo Los Angeles Lakers y New York Knicks estaban al acecho. Los Knicks... ese gran equipo cuya meta es batir el récord del mundo de traspasos en un año. Aunque claro visto lo visto, tampoco les va tan mal. A la lista anterior siempre hay que sumarles otras franquicias con el culo inquieto y agenda completa; Portland, que siempre busca asiento para LaFrentz; Memphis, que pese a Marc, son conscientes de la terrible debilidad interior que tienen; y Charlotte, que últimamente también está en el candelabro (parafraseando a la ínclita modelo de garrafón).
A lo que iba, que el cartel de Marion for sale lleva colgado un tiempo en la fachada de Miami. ¿A cuento de qué? Su objetivo fundamental es Carlos Boozer, el teórico ala-pívot titular - y digo teórico por que a día de hoy me quedan dudas sobre si Millsap pugnaría en igualdad de condiciones con Boozer - que cumple contrato este año, aunque tiene una player option para la siguiente temporada. Boozer es un interior de pleno derecho, no como Marion, que es un reconvertido. Aunque es fuerte y anotador en el poste, tampoco creo que solvente los problemas en cuanto a intimidación y defensa, por su limitada altura y media capacidad atlética. Claro que, si cuenta con el visto bueno de Spoelstra, será bienvenido.
La duda es, ¿y a quién pones en el puesto de pívot? ¿Al mismo Boozer? ¿Otro traspaso? El cuento de nunca acabar... ¿Te inventas un Joel Anthony? Creo que esto no termina aquí. Vaya, si Anthony es la solución, con todos los respetos para el canadiense, casi prefiero a Papadopoulos... ¿Cómo? ¿Qué he dicho? No me hagáis caso, esas palabras no han salido de mi boca ¡siempre lo negaré!
El que no se consuela es porque no quiere. La última victoria - y casi la primera - del Cajasol esta temporada abrió una puerta - para algunos - a la esperanza de la salvación. El juego del Cajasol no fue radicalmente opuesto al desplegado hasta la fecha, pero eso sí, una victoria es una victoria, y encima frente a un rival directo, salvando las enormes distancias.
El partido fue categóricamente malo. Si yo fuera extranjero y llegara a España sin tener ni idea de la ACB, por supuesto aseguraría cualquiera de estas dos cosas: o bien que estos equipos no tiene nivel ACB, o bien que menudo nivel tan bajo tiene la liga española en este momento. ¿Reproche? Sí, y además compartido, sopesando las corrientes pesimistas que se oyen y leen por ahí. ¿Motivos para la esperanza? También, porque dentro de poco llega la Copa del Rey, con el consiguiente alegato a la pasión y a la emoción.
De todas formas, ganar partidos mejora el juego - intuyo, ergo espero - y sólo dos partidos separan al Cajasol del último equipo en puestos de salvación, el ViveMenorca. Como peor no se podía jugar, y como los fiascos deportivos de Bennett, Edney, Collins, y sobre todo Humet, quieren pasar a mejor vida - eso espera Pedro Martínez - todavía atisbo resquicio de vida en esta plantilla.
Atisbo que ha llegado con Branko Milisavljevic, panacea de todos los males cajistas - nótese la ironía - que ha aterrizado con buen pie en Sevilla. El primer partido no, pero el segundo se destapó como lo que es, un base chupón pero que no teme las responsabilidades. Suya fue la bola en los últimos momentos del partido, en los que se partía el bacalao, y no le tembló la mano para anotar tiros libres, subir el balón sin riesgos y hacer que sus compañeros le buscaran como referencia de remanso de paz y tranquilidad. Por favor, que no se contagie del pesimismo.
Vale, y sin que sirva de precedente, al fin un partido decente de Andrés Miso. El cupo de nacionales tiene tantas cosas buenas como malas, pero si sirve para que Miso se parezca al de su año en Fuenlabrada, olé por Llorente (ya sé que me llevaré palos por esto).
Con lo poco que me gusta hablar sobre malas noticias y últimamente no paro de hacerlo, tengo que hacérmelo mirar. Resulta que el escolta de los Bucks, Michael Redd, sufrió una lesión en el último partido de Milwaukee frente a Sacramento Kings, que le mantendrá apartado fuera de las canchas durante toda la temporada. Por enésima vez, la tristemente famosa lesión de ligamentos de la rodilla, cruzado anterior y lateral medio en este caso, y traduzco: los ligamentos de la rodilla hechos añicos.
Para más inri, esta lesión llega cuando el equipo de Michael Redd se juega la entrada en playoffs, lugar al que no llegan desde el 2006. Como a estas alturas ya quedan lejos los años en los que los Bucks tenían puesto vitalicio en playoffs de la mano de su original Big Three - Ray Allen, Glen Robinson y Sam Cassell - el acceso este año, en el que el Este se ha puesto las pilas y gana enteros en su credibilidad contra el Oeste, era aún más meritorio. De conseguir este objetivo, el escolta estelar también tendría más que difícil su concurso, por lo que es previsible que los servicios médicos de Milwaukee prefieran esperar a una recuperación lenta pero eficaz.
Durante lo que llevamos de temporada, Michael Redd ya se había perdido 14 partidos, en los cuales tanto el base emergente Ramon Sessions como el todoterreno Richard Jefferson habían tomado los mandos de la responsabilidad anotadora. Queda ahora esperar si esta trayectoria continúa ante la lesión de larga duración de su estrella.
Los Grizzlies han despedido a Marc Iavaroni después de un inicio de temporada más flojo de lo previsible (11-30). Y previsible era que en Memphis se cansaran de él, cuando en año y medio la famosa excelencia en el juego que se supone que iba a traer se ha convertido en el enésimo proyecto fallido. Lo afirmó Marc Gasol en unas declaraciones recientes, y también un Darius Miles que acaba de llegar: es un equipo sin química.
¿Que la química llega con las victorias? De acuerdo. Pues haz que tu equipo juegue bien, que será mejor para conseguir la victorias. Iavaroni venía precedido de un aura atractiva y casi lujuriosa por haber pertenecido al staff técnico de Mike D'Antoni en su etapa en Phoenix, famosos por el juego rápido y eléctrico, en el que todos los jugadores anotaban a partir de la asistencia de Steve Nash, el run & gun. Claro, tú tienes en tu plantilla a una Steve Nash en la dirección de juego y todo es más fácil; pero creer que un recién llegado a la liga como Mike Conley, o un cabeza loca como Kyle Lowry pueden desempeñar una labor parecida en un... 20% a lo que hacía Nash, pues hijo, háztelo mirar.
Después de haber comprobado que tal circunstancia era imposible, el desajuste ofensivo era evidente. ¿Solución? Como en el colegio, balón que tengo, balón que me tiro. Correcto. ¿Vais muy lejos así? Como que no. Por tanto, a apretar en defensa. ¿Candidatos? A mí me viene mal, yo tengo cita con el médico, a mí me lo prohibe mi religión... Conclusión, no defiende ni el tato. Uno de los equipos que permite más puntos en contra. Apañados vamos.
Por ahora no he leído que suenen candidatos. Estaré pendiente.
Dominar así, con autoridad. Los Clippers han padecido esta noche la cólera del heredero natural de Shaquille O'Neal, que se ha destapado con 42 puntos (career high), 15 rebotes y 3 tapones. Como en tiempos del Gran Aristótéles, la supremacía en la zona fue tal que el juego prácticamente se mostró como un aporte incesante de balones a Will, pozo sin fondo y creador de puntos. El mate es el camino más corto entre el balón y los dos puntos.
Que sí, que delante estaban los Clippers, que menuda temporadita llevan, que no contaban ni con Camby ni con Kaman, pero que le quiten lo bailao. También Shaq consiguió su record de anotación frente a los Clippers y nadie dijo nada.
Ahora Phil Jackson puede sentar las bases de lo que quiere de estos Lakers a partir de ahora. Sabe que Bynum puede y debe anotar con solvencia en la zona - tampoco había que estar muy avispado saberlo - por lo que llega la siguiente pregunta: ¿sabes defender sin faltas? Contesta después de la publicidad.
Atención, pregunta: ¿cómo tiene que estar la liga de desarrollo americana como para que consiga el galardón de Jugador de la Semana el ex-estudiantil Walker Russell Jr.? Hay cosas que no comprendo. Para la respuesta a la pregunta inicial, barajo varias opciones:
O Walker Russell cuando pasó por España no enseñó nada absolutamente de lo que podía ofrecer en beneficio del equipo - ni siquiera de sí mismo.
O el juego más orientados a los 1 contra 1 de los campeonatos americanos le venían mucho mejor al nivel de Russell, al igual que a la mayoría de los bases americanos que llegan a Europa (no nos engañemos).
O la más probable, la liga de desarrollo es una castaña infumable, en la que el verdadero nivel táctico y técnico de los equipos dista años luz de la nodriza NBA. ¿Capacidad atlética? Toda la que quieras, pero consistencia del juego... ya es otra historia.
Es por eso por lo que me planteo la idoneidad del mercado D-League como suministrador de jugadores para Europa. Casos como los de Pops Mensah Bonsu, Andre Barrett, Nik Caner Medley o el comentado antes Walker Russell Jr. reflejan la actualidad de esa liga en menor o mayor grado. Caner-Medley es un jugador interesante, pero ni mucho menos el típico extracomunitario resolutivo al que otrora se le daba el balón en los momentos donde se decidía el pastel, y Russell... lo aficionados estudiantiles lo padecieron hace poco tiempo, así que ellos podrían opinar sobre el asunto.
Por otro lado, como el bagaje atlético de muchos de estos jugadores todavía supera con creces a la media del producto nacional, el desequilibrio que producen gracias a tal circusntancia es suficiente para marcar diferencias respecto del baloncesto europeo. Casos como los de Pops Mensah Bonsu - que pasó por el DKV Joventut) o Rawle Marshall (en la Cibona Zagreb, aunque famoso por el puñetazo a otro jugador) son esclarecedores de ese escalón deficitario en Europa en el tema físico. Intuyo que a medida que este escalón vaya disminuyendo, el flujo continuado de los Pops y Rawles de turno también bajará. O eso espero.
La gran esperanza italiana ha vuelto a las pistas. Sus eternos problemas de espalda parecen haber remitido y Mike D'Antoni ya cuenta con él como miembro de la rotación de aleros de los Knicks. Son cuatro sus partidos disputados hasta la fecha, y dos desde su reaparición. Los seguidores del equipo de la Gran Manzana respiran aliviados por ver como su apuesta europea del draft de este año llega con la humildad y el esfuerzo de una recuperación dolorosa para ayudar a sus compañeros buscando el camino de los playoffs. Buena noticia para el jugador, para su entrenador, y sobre todo para el GM Donnie Walsh, que escuchó no pocas críticas tras la controvertida decisión de finales de junio.
La competencia, llegados a este punto, es más feroz de lo presumible en un principio. Como los resultados deportivos no llegaban, se optó por traspasar a Zach Randolph y Jamal Crawford, llegando a su vez Al Harrington - realizando una buena aportación desde el banquillo - y Tim Thomas. Es decir, dos jugadores versátiles que pueden altener los puestos de alero (3 y 4), muy del corte de D'Antoni, buenos manejadores de balón y tiradores, aunque con poca presencia interior.
A su vez, a comienzos de campaña emergió la figura de Wilson Chandler como titular del equipo. El alero sophomore se está adaptando al roll del "Shawn Marion del Phoenix", además de destaparse como un decente anotador. El que fuera la gran apuesta de Isiah Thomas para el puesto de alero en la etapa de la escabechina deportiva, Jared Jeffries, ha encontrado minutos desde el inicio como pívot titular, más por su altura que por su labor interior de intimidación. Así que no supone grave riesgo para los minutos disponibles de Gallinari.
En estos dos partidos, Gallinari sólo ha disputado una media de 15.5 minutos, para anotar 7.5 puntos, con 2 rebotes, 1.5 asistencias y 1 robo. Números notablemente mejorables, pero dada la larga ausencia del italiano, es comprensible que la adaptación a la liga y al esquema de D'Antoni sean más lentos aún. De todas formas, ¿a qué novato europeo no le cuesta adaptarse?
El partido frente a Ricoh Manresa fue la enésima reválida suspensa del Cajasol. Las sensaciones de equipo que quiere y no puede llevan a la conclusión - no prematura - de que el año que viene los rivales de los sevillanos serán otros.
Cajasol plantó cara al Ricoh durante todo el partido, en mayor o menor medida. De hecho, un parcial de 10-0 en el tercer cuarto, en el que también se pusieron por delante, permitió a los optimistas llegar a pensar en la tercera victoria de la temporada; pero cuando los nervios y la inercia negativa durante la temporada hace mella, es tan difícil revertir la situación que el marcador final acabó por destrozar las esperanzas de los aficionados. Aficionados que, dicho sea de paso, montan en cólera cuando se les habla de la labor deportiva de los dirigentes de su equipo. Ya sea por las cuestionables decisiones en el tema fichajes, o por la poca o nula preocupación en la difusión de Cajasol como embajador deportivo de Sevilla.
Si la situación deportiva y social del Cajasol de Sevilla no cambia, el fantasma del descenso a la LEB Oro - e incluso de la desaparición del club - se asoman cada día más a San Pablo. El equipo va último en la clasificación, con sólo 2 victorias en liga regular, con un entrenador ya despedido y con otro que no termina de enderezar el rumbo. Ante la desesperación de los aficionados, el club apuestó por las únicas medidas que puede tomar ya, y es fichar a nuevos jugadores. A la positiva aportación de Nik Caner-Medley se le sumaron estos días las llegadas del pívot barcelonista Xavi Rey en concepto de cesión, y del base serbio Branko Milisavljevic, anotador compulsivo pero con fama de difuso y poco comprometido en el juego colectivo.
Estas adquisiciones suponen un aumento de capital humano para buscar mejores rotaciones, pero en ningún caso tienen pinta de ser capaces de invertir radicalmente la situación del Cajasol en las jornadas que quedan. Jornadas que son ya la mitad menos una, así que la cuenta atrás para el fin de la agonía deportiva del Cajasol se ha activado ya. Siguiente estación: Unicaja Málaga. Traduzco: otra jornada menos para recuperarse. Espero traer buenas noticias próximamente.
Nueva meta conseguida por los jugadores españoles. Rudy Fernández acudirá al concurso de mates de la NBA tras vencer en la votación popular según informa el diario The Oregonian, y tras imponerse en ella al alero de los Bucks Joe Alexander y al base de los Thunder Russell Westbrook. En el concurso de mates, se enfrentará a Dwight Howard (Orlando Magic), a Nate Robinson (New York Knicks) y a Rudy Gay (Memphis Grizzlies).
Aunque los ojos estaban puestos ahora en Sergio Rodríguez por si accedía a colaborar en el concurso como socio de Rudy en el mate por parejas, el canario ha decidido declinar la invitación de Rudy para tomarse unos días de vacaciones, sobre todo sopesando la idea de un posible traspaso tras los continuos rumores que le sitúan en New York. En tal caso, el compañero de Rudy para el concurso sería Brandon Roy, si éste es seleccionado como reserva en el All Star de los mayores - y cuenta con muchas papeletas para ello.
Se espera pues que el nivel de la competición sea extraordinario, con el vigente vencedor Howard y con el también vencedor en ediciones pasadas Robinson. Gay es también otro enorme matador que dará un buen espectáculo. Parece que ha sido efectivo el vídeo promocional del español...
Según informa la web Realgm.com, las continuas ausencias de Tracy McGrady por lesión no son plato de buen gusto para su compañero Yao Ming. La relación extradeportiva entre ambos es buena, incluso muy buena, pero en el ambiente que rodea al chino últimamente está surgiendo el rumor de que no puede arrastrar él sólo a un equipo en el que tantas expectativas había puestas a principios de campaña.
McGrady sólo tiene 29 años; no es una edad considerable para jugar al baloncesto. De hecho, podría pensarse que estaría en pleno cénit de su carrera. Otros muchos han jugado su mejor baloncesto con esa edad o incluso más tarde. Pero claro, las continuas lesiones de la maltrecha espalda de Tracy McGrady son motivo de preocupación en Houston.
Si atendemos a la posibilidad de que McGrady será el año que viene un expiring que cobre 23.2 millones de dólares, de que todavía - y por mucho tiempo - tiene un cartel envidiable en la mercadotecnia NBA, tampoco sería tan descabellado que el chino tuviera suficientes motivos para pensar que la opción de traspasarle fuera tan mala.
Mi opinión personal es que resultará complicado encontrarle acomodo, y sobre todo, más complicado aún conseguir esa pieza que logre sustituirle con plenas garantías. McGrady no es el de Orlando, pero es un jugador solvente y resolutivo. Sólo se me ocurren posibles sustitutos para T-Mac algún miembro del fastuoso draft del 2003; eso sí, dudo mucho de que sus equipos estén por la labor de traspasarles también.
Es noticia: el duelo estelar de la Copa del Rey de este año será el que enfrente al Regal Barcelona y al Real Madrid. Si me hubieran obligado de antemano a elegir un encuentro de alto voltaje para abrir de pleno la Copa del Rey de este año, conocidos los cabezas de serie y todos los competidores, habría pensado a buen seguro que ningún otro duelo levantaría tantas pasiones como el que tendrá lugar en los primeros cuartos. Sin duda, para ninguno de los dos habrá sido plato de buen gusto un enfrentamiento tan tempranero, pero la Copa es así, uno de los dos dirá adiós a las primeras de cambio.
Todos los emparejamientos:
A. Regal Barcelona - Real Madrid B. DKV Joventut - MMT Estudiantes C. Unicaja Málaga - Kalise Gran Canaria D. Tau Cerámica - Pamesa Valecia
Regal Barcelona - Real Madrid (60% - 40%) Un duelo de esta índole siempre suele estar más igualado de lo normal, pero las temporadas de cada uno ofrecen un panorama algo más alentador para el Barcelona, que disfruta de un momento de juego más dulce que su homólogo madrileño. La rotación de hombres interiores en el Barcelona parece más profunda, aunque con la última adquisición de Tomas Van der Spiegel por parte del Madrid, las distancias se han acortado. Pero la cuestión está en la línea exterior del Madrid, con los discutidos de siempre: Pepe Sánchez - ex-azulgrana - sufre una clara depresión de juego, forma y motivación; Louis Bullock no desborda ni anota con la misma fluidez de antaño, y Marko Tomas es una sombra del extraordinario jugador que deslumbró el año pasado en Fuenlabrada, volviendo a mostrarse tímido y sin ideas en la cancha, a pesar del potencial que sigue teniendo. Es por ello por lo que si estos males remiten de aquí al comienzo de la Copa, la balance se equilibrará. Mientras tanto, lo que hay es lo que hay.
DKV Joventut - MMT Estudiantes (60% - 40%) Desigual duelo entre badaloneses y estudiantiles. Aunque el DKV está haciendo una campaña más que decente (12-4), se nota demasiado la ausencia de Rudy Fernández, y la tan larga lesión de Ricky. Con el joven base de vuelta a la competición, los ánimos y la agresividad defensiva la Penya dispone de un equipo temible en este tipo de competiciones. Se enfrenta a un Estudiantes venido a menos, una sombra del equipo del Ramiro de hace pocos años, pero que se ha ganado - o "le han ganado" - el derecho a participar en la Copa del Rey por el convenio acordado con la ACB para que cada 2 años la Copa se juege en Madrid - con el consiguiente beneficio a alguno de los equipos de la capital. Injusticia donde las haya, de todas todas. Estudiantes acaba de ganar su partido frente al CB Granada, que le permite encabezar el grupo de los que aspiran a salvarse de la quema a final de campaña. Eso sí, sigue siendo, junto con el del año pasado, uno de los peores Estus de los últimos años. Razón de más para dar como favorito al Joventut.
Unicaja Málaga - Kalise Gran Canaria (65% - 35%) Teóricamente un duelo desequilibrado a favor del conjunto malagueño en cuanto a nombres se refiere, pero la temporada de los canarios sigue asombrando, y no se podría descartar una sorpresa. El Kalise tiene un auténtico fortín en casa, pero la Copa se disputa en Madrid. Este hecho no debe ser trascendental, ya que el club dispondrá de un gran despliegue para acompañar al equipo en su periplo copero. Eso sí, si Unicaja mantiene el nivel exhibido desde comienzo de temporada, con esa defensa asfixiante y ese contraataque mortífero, los canarios lo van a tener muy difícil. Si hay algo de lo que adolecían los malagueños hasta esta campaña era era de una respuesta más regular y destacada de sus teóricas estrellas. Marcus Haislip ha subido su nivel y ofreciendo facetas ofensivas casi imparables para otros alapívots en Europa. Archibald y Kelati - menudo descubrimiento éste - se han adaptado a la perfección al Aíto-system, y la recuperación de Berni y Cabezas apuntala las pequeñas carencias que había tenido el equipo cajista en momentos puntuales de la temporada.
Tau Vitoria - Pamesa Valencia (70% - 30%) Lo coloco como duelo más desigual por la intratable racha de buenos resultados del Tau, líder en ACB con una única derrota, y líder en su grupo de Euroliga. Los de Ivanovic son el rival a batir hasta ahora, y no dan muestras de flaqueza bajo ninguna circunstancia. Además, la incorporación del macedonio Ilievski supone un upgrade en su rotación exterior, y una amenaza extra por su condición de imprevisibilidad. Obstante, las grandes amenazas del Tau son los Rakocevic, Splitter, Teletovic y compañía, estructurados en un organigrama disciplinado y agresivo a las órdenes de Ivanovic. Aunque Pamesa ha mejorado en las últimas fechas con el asentamiento de Spahija y la llegada de Nielsen, las ausencias mentales en momentos concretos del partido suponen un duro lastre para conseguir la regularidad en un sólo partido y frente a uno de los mejores conjuntos del continente. Balance claro para el Tau, y cualquier otro resultado sería una tremenda sorpresa.
Si me tengo que decantar por alguno, me arriesgo y digo que el vencendor será Unicaja de Málaga, pero como me llevo tan mal con Murphy, cualquier resultado es posible. Bendita Copa.
Hace unos días Cleveland dejaba entreabierta la herida sangrante de unos desconocidos Boston Celtics, en plena crisis de juego y de resultados. Si bien el inicio de campaña estaba siendo espectacular, batiendo marcas positivas de victorias en toda la historia de la liga, un balance de 7 derrotas en los últimos 10 partidos disputados les colocaba en uns situación algo preocupante. Pasaron a ser terceros de la Conferencia Este, por detrás de los imparables Cleveland Cavaliers y de los regulares Orlando Magic.
La victoria de los Celtics la pasada noche frente a los Raptors de Calderón supone la reconciliación con la victoria, un pildorazo de confianza y una vuelta a la normalidad. Porque es normal que los Celtics derroten a los Raptors - que también estaba en horas bajas - y porque el hábito del buen juego no puede desaparecer así como así.
El resultado (94-88) puede ser engañoso. Los tres primeros cuartos dominados por los Celtics en el marcador y en el juego, con un Ray Allen espectacular - 36 puntos con 8/10 en triples al final del partido - y con el base Rajon Rondo encontrando el camino para asistir fácilmente tanto a Allen como al resto del equipo. La victoria momentánea de los Celtics espoleó a los Raptors, y Chris Bosh quiso dar la réplica en varias acciones, que terminaron por encararle con el alapívot céltico Brian Scalabrine.
El último cuarto fue para Toronto, que veían como se acercaban más a los verdes en el marcador con el acierto de Andrea Bargnani y el propio Bosh. Pero los cuartos sólo duran 12 minutos y el punto se fue hacia Boston. Calderón reapareció para jugar 21 minutos, aportar 6 puntos y 3 asistencias, y para mantener inmaculada la estadísticas de tiros libres (4 de 4), por lo que continua su idilio con la historia. Su record asciende ya hasta los 79 de 79, cada vez más cerca de los 97 consecutivos de Micheal Williams.
Hace unos meses se hablaba de unos Portland Trail Blazers como equipo bien organizado, con estructura conformada entorno a un núcleo de jóvenes talentos a los que, en poco tiempo, había que renovar sus contratos de novatos para engrosar la nómina de veterano pagados a su precio de mercado. Brandon Roy, Greg Oden, LaMarcus Aldridge... además de ser buenos jugadores, poseían el don del contrato novato, y esa fortuna para los Blazer era un arma de doble filo. Hoy es estupendo, pero mañana sería un quebradero de cabeza.
Me explico: a la hora de promocionar esos contratos, el valor económico sobre el salary cap de la franquicia se dispara notablemente, por lo que era más que probable que en esos procesos de renovación, al menos uno de los jugadores tuviera que ser traspasado para no sobrepasar el luxury tax (impuesto de lujo). Astutamente, Kevin Pritchard había conseguido deshacerse de varios contratos monstruosos que hipotecaban el futuro de los Blazers para hacer menos tortuoso el camino hacia un equipo bajo el límite salarial.
Uno de esos contratos era el de Darius Miles, que había sido cortado debido a su perpetua lesión de rodilla, con la esperanza de que ninguna otra franquicia se fijara en él cuando se hubiera recuperado para no tener que sumar con su contrato en el cap de los Blazers. Las cosas iban bien hasta que Darius fue tentado por la suerte este verano y probó con los Celtics. Obviamente, pertenecer a una plantilla ganadora como la de los Celtics no tiene precio - como dirían los de Mastercard - pero visto lo visto, los verdes no estuvieron por la labor de firmarle para toda la temporada y sólo jugó unos partidos de verano en los training camps. Más tarde llegó Memphis, que trató de tantear su estado físico y le firmó con un contrato temporal. Aunque llegó a jugar algún encuentro de forma testimonial, tampoco duró demasiado su singladura y fue cortado.
El problema llega cuando Portland se pone a valorar el peso de contrato de Miles en función a la normativa NBA. Obviamente, el alero no ha tenido continuidad en ninguno de los equipos que le firmaron este año, pero por resquicios legales, si juega dos o más partidos con cualquier franquicia, el contrato de Miles pasará a contar inmediatamente en el salary cap de los Blazers. ¿Por qué? Porque también están incluidos en el salary los partidos disputados durante los training camps, resquicio legal que se ha descubierto ahora.
Ante tal situación, el aparato mediático de Portland se ha puesto manos a la obra para que a ninguna otra franquicia se le ocurra firma a Darius hasta final de temporada. Está claro que están en su derecho de buscar el máximo beneficio como club, pero ¿a costa del trabajo de un jugador? A fin de cuentas, Darius Miles sólo busca una oportunidad como profesional del baloncesto que es. Me surgen dudas sobre la licitud de tal tarea. Incluso en la página oficial de la NBA, medio generalmente aséptico, se hacen eco la circunstancia.
Si los últimos rumores son ciertos, Memphis podría estar interesado en repescar a Darius Miles, y con ello, el gozo de Portland en un pozo. Lástima que el estado de euforia de Pritchard pueda tocar su fin.
Última hora: Según la publicación RealGM.com, Memphis ha hecho oídos sordos a la intimidación de la dirección de los Trail Blazers para evitar la firma de Miles y le han vuelto a contratar. Tanto la Asociación de Jugadores (NBPA) como la NBA están de acuerdo en la postura de Memphis y de Darius en cuanto a la libertad de contratación de jugadores, y reconocen que la provocación de Portland por la emisión a los 29 equipos restantes de sendos correos electrónicos intimidatorios supone una grave violación de las normas anticonflicto entre franquicias.
Kevin Durant llegó a la franquicia de los Sonics con la dura tarea de establecer el punto de inflexión que devolviera a la histórica ciudad a su otrora situación de privilegio dentro de los playoffs. Habiendo cumplido sólo un año del ciclo universitario, las exigencias iniciales pronto se mostraron demasiado halagüeñas, ya que ni Durant estaba preparado para dar ese salto de calidad, ni el equipo que le rodeaba era la panacea.
La venta de la franquicia y el posterior traslado a Oklahoma City tampoco benefició. Nueva ciudad, nuevo pabellón, nuevos espectadores a los que había que conquistar... Durant firmaba a comienzos de la temporada 2008-09 unos números magníficos, pero estaba lejos de poder contribuir decisivamente con ellos en la marcha del equipo. Las victorias no llegaban, y la angustia entre los nuevos aficionados de los Thunder se hacía cada vez más acuciante. Además, la más que discutible elección de Russell Westbrook como primera opción de los Thunder en el último draft, por delante de otros jugadores teóricamente más talentosos que el atlético combo guard no permitía presagiar mejores momentos en un futuro.
La situación actual difiere bien poco. Ganan 1 de cada 7 partidos (balance de 5 victorias por 30 derrotas), pero se atisban síntomas de mejoría. El novato Westbrook se adapta cada vez mejor a su posición de base titular. La ausencia de los Collison y Wilcox del quinteto titular permite que Jeff Green, un sophomore con una mano excelente y un margen de mejora prometedor, juegue más cerca del aro, y sobre todo, que Kevin Durant juegue en su sitio.
Además de haber mejorado la versatilidad de su juego, Durant es más ejecutor, más decisivo y está rodeado de un núcleo de compañeros en plena irrupción. Jeff Green y Russell Westbrook son los complementos perfectos para que Durant se haya aupado al séptimo lugar en la clasificación de máximos anotadores de la NBA. Es una lástima que los Thunder no disfruten de un pívot de garantías - los jóvenes centers de Oklahoma City Sene, Petro o Swift están todavía muy verdes - porque de ser así, la situación en la tabla sería otra.
Incluso sus porcentajes de tiro van en aumento. De poseer un débil 34% en tiros triples la pasada campaña, a pasar a un 44%, colocándose también entre los mejores en esta faceta. Y es que la cuestión era clara: si tienes a un jugador con esa altura (2.06 m) jugando tan lejos del aro, y siendo defendido por gente que le iguala o supera en velocidad, no hay otra cosa que buscar alternativas y que Durant se vea emparejado por otro aleros de constitución parecida pero de menor velocidad. Así es mucho más fácil sacar ventajas de los duelos 1 contra 1, y también más provechoso alternar posición con Desmond Mason, un escolta que se las arregla con soltura en posiciones interiores.
Lejos ya de cuestiones tácticas, el salto de calidad que ofrece Durant este año para el juego de los Thunder deja entrever la posibilidad mucho más cercana de un miembro de Oklahoma vistiendo la camiseta del All Star. Por supuesto que acudirá al equipo de los Sophomores el próximo mes de febrero, pero es que además, por números, podría haber tenido ciertas opciones de acudir a la cita de los mayores. Como la temporada de los Thunder no es tampoco para tirar cohetes, esas ligeras opciones se reducen exponencialmente, aunque el crecimiento progresivo de estos jóvenes puede traer sus frutos dentro de unos años. Ahora hay dejarles crecer - como en el anuncio - que sólo tienen 20 años, edad que algunos firmaríamos... algunos que peinamos canas... ¿Peinar? ¿Eso qué diablos es?
La ausencia por lesión del extremeño José Manuel Calderón removía las conciencias canadienses por no haber hecho una mejor labor en el mercado de traspasos. Si bien las adquisiciones de Willie Solomon y Roko Leni Ukic cubrían en cantidad las plazas de base reserva de los Raptors, a la mayoría de los aficionados les daba en la nariz que de ninguna manera cubrían en cuanto a calidad se refiere.
El año pasado, Ford y Calderón se disputaban la dirección en la pista del equipo de Toronto, con estilos muy diferentes de juego. Este año, Ni Solomon ni Ukic disponían de los minutos suficientes como para establecer un orden asociado al tempo de partido que, tanto Mitchell en su momento como Triano ahora, necesitaban para manejar la situación. De hecho, se intuía más una cuestión simplemente aleatoria en la asignación de minutos a los bases reservas - que tampoco es de extrañar, porque ese botón de random parece existir en la mayoría de las franquicias.
Esta noche los Raptors han vencido a los Orlando Magic con un Roko Ukic a un gran nivel. Sus números, 12 puntos, 7 asistencias, y varias acciones de mérito al finalizar el encuentro, cuando todavía está el resultado por fraguarse. Jugando minutos y minutos de calidad. Por supuesto la titularidad de José Manuel Calderón no peligra cuando vuelva de su lesión, pero a lo mejor Ukic no es menos fiable que muchos de los bases reserva de otras franquicias. Un partido no sirva para establecer juicios de valor, lo sé, así que dejemos que la inercia siga su curso.
Quizá la adaptación del base croata a la liga americana deba seguir sus pautas mucho más lentamente que otros jugadores novatos que se enfrentan posteriormente al famoso rookie wall. De todas formas, Triano ya ha descubierto que Ukic no es manco. Me alegro por el chaval.
La entrada de un nuevo año siempre nos llena de buenos propósitos y buenas intenciones. Que si ir al gimnasio, salir y conocer gente nueva (para unos), salir menos y ahorrar pelas (para otros), y así sucesivamente. A ver si este año suena la flauta y los conseguimos (me incluyo).
